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¿A qué altura se debe colocar una pantalla interactiva? Guía para entornos empresariales y educativos

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Las pantallas interactivas han revolucionado la manera en que las empresas y las instituciones educativas trabajan, colaboran y aprenden. Sin embargo, para maximizar el rendimiento y garantizar una experiencia cómoda y ergonómica, es fundamental instalar la pantalla a la altura adecuada. Colocar una pantalla interactiva correctamente no solo optimiza su uso, sino que también asegura que todos los usuarios, desde empleados hasta estudiantes, puedan interactuar con ella de manera efectiva y sin incomodidades.

En este artículo, te explicamos cómo determinar la altura ideal para instalar una pantalla interactiva tanto en el entorno empresarial como en el educativo, considerando las diferentes necesidades y características de cada espacio.

Factores clave a considerar

Antes de hablar de medidas específicas, es importante tener en cuenta algunos factores comunes a ambos entornos que afectan a la altura a la que se debe instalar una pantalla interactiva:

  1. Tamaño de la pantalla: Las pantallas más grandes suelen instalarse un poco más alto, ya que ocupan más espacio vertical y necesitan una distribución visual adecuada.
  2. Altura promedio de los usuarios: En entornos donde la pantalla será utilizada por adultos, como oficinas, la altura será distinta a espacios donde interactúan niños, como las aulas de educación primaria.
  3. Interactividad: Una pantalla interactiva requiere que los usuarios puedan tocarla y escribir en ella cómodamente, lo que hace que la altura sea un factor clave para evitar posturas incómodas o tensiones físicas.
  4. Visibilidad: Toda la pantalla debe ser claramente visible para los usuarios, ya sea en una sala de reuniones o en un aula con varios estudiantes.

Altura ideal en entornos empresariales

En el entorno empresarial, las pantallas interactivas se utilizan comúnmente en salas de reuniones, salas de conferencias y espacios colaborativos. Aquí, el público objetivo generalmente está compuesto por adultos, y el uso de la pantalla interactiva puede implicar tanto presentaciones visuales como interacciones táctiles directas.

Consideraciones ergonómicas:

  • Altura promedio del usuario: La altura promedio de los empleados adultos ronda entre 1,65 y 1,75 metros. Por tanto, la colocación de la pantalla debe permitir que la mayoría de los usuarios puedan interactuar cómodamente con las áreas claves de la pantalla sin tener que estirarse o agacharse.
  • Distancia de visualización: En una sala de reuniones, la pantalla debe estar colocada de manera que sea visible desde cualquier punto. Una buena regla general es que la parte superior de la pantalla esté a una altura aproximada de 2 metros desde el suelo. Esto asegura una visibilidad óptima sin causar tensión en el cuello.
  • Altura del centro de la pantalla: El centro de la pantalla, que es el punto más importante para la interacción táctil, debería estar a una altura de entre 1,2 y 1,4 metros desde el suelo. Esto permite que los usuarios puedan interactuar de manera cómoda tanto con la parte superior como inferior de la pantalla.

Sugerencia de altura para pantallas empresariales:

  • Para pantallas de 65 pulgadas o más pequeñas: el centro de la pantalla debe estar a 1,4 metros desde el suelo.
  • Para pantallas de 75 pulgadas o más: el centro de la pantalla puede estar a 1,5 metros, pero ajustando siempre según la sala y el uso de la pantalla.

Altura ideal en entornos educativos

En el contexto educativo, las pantallas interactivas se utilizan en aulas, bibliotecas y otros espacios de aprendizaje, donde tanto estudiantes como profesores interactúan con el contenido digital. Aquí, la altura a la que se instala la pantalla depende en gran medida de la edad de los estudiantes y del nivel de educación.

Consideraciones ergonómicas:

  • Nivel educativo: En aulas de primaria, los estudiantes suelen ser más bajos que los adultos, por lo que la pantalla interactiva debe colocarse a una altura accesible para ellos. En la secundaria y educación superior, se puede adoptar una altura similar a la de los entornos empresariales.
  • Interacción frecuente: En el entorno educativo, los alumnos deben poder acercarse a la pantalla y utilizarla para realizar actividades, ya sea escribiendo, dibujando o manipulando contenido digital. Esto implica que la pantalla debe estar lo suficientemente baja como para que los estudiantes más jóvenes puedan alcanzar la parte superior e inferior de la pantalla.
  • Visibilidad para toda la clase: Al igual que en las empresas, toda la pantalla debe ser visible para todos los estudiantes. Sin embargo, los asientos de las aulas suelen estar organizados en filas, lo que puede implicar que la pantalla deba estar un poco más alta para que todos los estudiantes, incluso los del fondo, puedan verla bien.

Sugerencia de altura para pantallas en educación:

  • Para educación primaria (6 a 12 años), se recomienda que el centro de la pantalla esté a una altura de 1,1 a 1,2 metros desde el suelo. Esto facilita que los niños más pequeños puedan interactuar cómodamente.
  • Para educación secundaria y superior, una altura de 1,3 a 1,4 metros para el centro de la pantalla es adecuada, ya que los estudiantes suelen ser más altos y la interacción requiere menos ajustes.
  • Altura ajustable: En algunos casos, puede ser útil instalar soportes de pared ajustables que permitan mover la pantalla hacia arriba o hacia abajo según las necesidades del grupo. Esto es especialmente útil en aulas donde los alumnos varían mucho en altura o donde se enseña a varios niveles educativos.

Altura ideal con soportes móviles o ajustables

Tanto en el entorno empresarial como educativo, es recomendable considerar el uso de soportes móviles o ajustables, que permiten modificar la altura de la pantalla según la situación. Esto es especialmente útil si la pantalla será utilizada por distintos grupos de personas con diferentes alturas, o si se requiere mayor flexibilidad para adaptarse a diferentes dinámicas de uso (reuniones sentadas o de pie, aulas con alumnos de distintas edades, etc.).

Ventajas de los soportes ajustables:

  • Flexibilidad: Puedes ajustar la altura de la pantalla para acomodar a diferentes usuarios o cambiar su posición según el tipo de actividad.
  • Accesibilidad: Si tienes un grupo variado de usuarios, como estudiantes de diferentes grados o equipos de diferentes departamentos, los soportes ajustables aseguran que la pantalla esté a una altura cómoda para todos.

Instalar una pantalla interactiva a la altura correcta es esencial para maximizar su funcionalidad y garantizar una experiencia ergonómica, tanto en el entorno empresarial como educativo. En general, se debe priorizar una altura que permita una interacción cómoda y que asegure una buena visibilidad para todos los usuarios.

Para las empresas, una altura de 1,2 a 1,4 metros para el centro de la pantalla suele ser ideal, mientras que en las aulas de primaria puede ser necesaria una altura más baja, de 1,1 a 1,2 metros. En cualquier caso, lo más importante es asegurarse de que la pantalla sea accesible para todos y que ofrezca la mejor experiencia de usuario posible.

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