¿Estás dándole vueltas a la posibilidad de incorporar un monitor interactivo a tu espacio de trabajo, pero no terminas de decidirte?
Este tipo de recursos son cada vez más populares y no es de extrañar que ante el aumento de ellos en centros laborales y educativos de todo el país, sean más los que se lancen a valorar las ventajas de su incorporación.
En internet puedes encontrar información técnica y comercial sobre la oferta que existe para estos productos, las empresas que los fabrican, distribuyen y venden en España, y su aplicación en diferentes sectores. Sin embargo, puede que a pesar de todo el contenido disponible sigas con dudas sobre si la compra de una pantalla interactiva es un capricho o una necesidad. En las próximas líneas encontrarás la respuesta a través de un listado de pros y contras.
A favor
- Mejor colaboración. El trabajo en equipo es indispensable para conseguir los máximos resultados y la tecnología es, sin duda, una aliada.
- Reuniones a distancia. Con los software de videoconferencia y un monitor interactivo, se pueden celebrar encuentros virtuales con personas de todo el mundo. Comparte información, intercambia buenas prácticas e interactúa sin importar donde se encuentre la audiencia.
- Perdurabilidad de los materiales compartidos. Se pueden grabar las reuniones y conservar los documentos y materiales utilizados en el espacio de trabajo para que no se pierda información.
- Posibilidad de incorporar aplicaciones o softwares adaptados a las necesidades del espacio de trabajo, haciéndolo más dinámico y eficiente.
- Fuente inagotable de información. Conectado a la Red, las pantallas interactivas se convierten en un recurso único para profesionales y alumnos.
- Ahorro de costes. Las empresas y centros educativos presentan una importante reducción de los gastos asociados a recursos del día a día como folios, lápices, trayectos profesionales para la asistencia a reuniones, etc.
- Cuidado del medioambiente. Como consecuencia de lo anterior el reduce el impacto ambiental.
- Calidad-precio. Respecto a otras soluciones tecnológicas, los monitores interactivos resultan más económicos y, además, incluyen funcionalidades muy superiores. Algunas de las cuales ya hemos mencionado.
Estas herramientas facilitan y agilizan el trabajo, ya que son un recurso tecnológico que aportará valor y ventajas competitivas.
En contra
Las pantallas interactivas no presentan desventajas. Son soluciones que siempre suman. El balance es claramente positivo, lo que explica que no deje de cosechar adeptos.
La conclusión es clara: la pantalla interactiva es una necesidad. Si estás dispuesto a mejorar los recursos de tu centro de trabajo, solicita tu demo en Newline. Conocerás de primera mano la mayor calidad a un precio imbatible.